El PSE-EE de Barakaldo se hace eco del malestar vecinal por las continuas averías del elevador, inaugurado hace solo seis meses

Los Socialistas pedirán explicaciones en el Pleno, ya que el Gobierno local (PNV) no ha respondido a sus escritos

Foto ascensor pasarela Desierto

Hace solo seis meses que se inauguró la pasarela peatonal que une los barrios de Desierto-Urban y Lasesarre por encima de las vías del tren. Sin embargo, los vecinos y vecinas vienen advirtiendo, casi desde el primer momento, de los numerosos desperfectos que sufre esta infraestructura. Uno de los principales problemas son las continuas averías del ascensor.

Según han lamentado los propios ciudadanos y ciudadanas al PSE-EE de Barakaldo, el elevador lleva actualmente cerca de un mes averiado. “Hay un importante malestar vecinal por este asunto. No parece de recibo que un ascensor tan nuevo esté más tiempo parado que funcionando”, ha valorado Carlos Fernández, concejal del Partido Socialista.

Las personas con movilidad reducida o que transitan con carritos de bebé se ven ahora obligadas a bajar por las escaleras o usar la rampa, que conlleva un recorrido mucho mayor. La última avería ha coincidido, además, con muchos días de lluvia, con lo que el trastorno ha resultado aún mayor.

Lo cierto es que es la segunda vez que el PSE-EE se hace eco de las averías del ascensor de la pasarela. La primera ocasión fue el 24 de enero y la segunda el 2 de marzo, cuando elevador llevaba ya alrededor de 10 días averiado. El Gobierno local de Amaia del Campo (PNV) no ha respondido a los escritos de los Socialistas pidiendo una solución urgente y tampoco ha resuelto el problema.

Ante la falta de información existente, el PSE-EE ha decidido pedir explicaciones a la alcaldesa en el próximo Pleno Municipal a través de unas preguntas. “Los vecinos y vecinas de Desierto-Urban se merecen saber qué está ocurriendo, porque lo único que ven desde hace varias semanas es un cartel que dice ‘Ascensor en reparación’, pero no hay nadie trabajando allí”, ha explicado Fernández.

 

CHARCOS, BALDOSAS SUELTAS…

Los problemas en la pasarela, no obstante, van más allá de las averías del ascensor. Grandes charcos, numerosas baldosas sueltas o incluso rotas, alcantarillas que no dan abasto para recoger el agua de la lluvia, remates pendientes… A día de hoy las deficiencias todavía se cuentan por doquier.